Toma mi mano,
a ver si truncada encuentras
la línea de amor que se adentra en mi piel
como surco de salvaje estocada.
Con tu corazón de diamante
marca el final
y que se derrame mi sangre sobre tu palma
hasta la última gota, tanto como te amo,
o hasta que ahogado sin destino acabe el río
si mi mano
has soltado.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario